NO AL BLANQUEO DE LA ULTRADERECHA

Lona colgado por Vox en la calle de Alcala de Madrid 

Mi querida España, esta España mía, esta España nuestra

De tu santa siesta, ahora te despiertan versos de poetas
¿Dónde están tus ojos?, ¿Dónde están tus manos? ¿dónde tu cabeza?

Mi querida España, esta España mía
Esta España nuestra, ay, ay
Mi querida España, esta España mía
Esta España nuestra

Mi querida España, esta España mía, esta España nuestra
De las alas quietas, de las vendas negras sobre carne abierta
¿Quién pasó tu hambre?, ¿Quién bebió a tu sangre cuando estabas seca?

(Estrofas de la canción Mi querida España de la cantante Cecilia)

A través de la derecha política y periodística, unos conscientemente y otros por desconocimiento histórico, se está realizando un blanqueo de los fascistas de ultraderecha en nuestro país, cuestión que me parece muy grave y preocupante, en especial para las nuevas generaciones que no han vivido la dictadura franquista, ni la transición democrática, plagada de hechos y atentados de una extrema derecha similar en sus planteamientos políticos a los actuales.

Si escarbamos un poquito en la historia de España, la extrema derecha fue, tanto al final de la dictadura franquista como en la transición democrática, quien puso palos en las ruedas para  que no se avanzara en derechos y libertades democráticas en nuestro querido país, llamado España. Ahí están las hemerotecas para comprobar lo que afirmo  Ya lo decía la cantante Cecilia en una de de las estrofas de la canción “Mi querida España”,  Compuesta en 1975, canción que es una crítica soterrada a la situación socio-política de la España de aquellos  momentos, postrimerías de la dictadura franquista y preludio de la transición a la democracia.

Que pronto se olvida en este país las tropelías de la extrema derecha, en aquellos tiempos.  Su ideología xenófoba y machista a tope, los crímenes contra la clase trabajadora, contra la cultura y contra cualquier tipo de avances democráticos. No olvidemos quien gobernaba en España cuando detuvieron  a la dirección de CCOO,  en el convento de Los Oblatos en Pozuelo de Alarcón, en 1973,  encarcelados, procesados y condenados en el juicio del Proceso 1001 a un conjunto de 162 años de cárcel.

No olvidemos la masacre de los llamados “Sucesos de Vitoria”, ocurridos en marzo de 1976, donde murieron seis trabajadores, cuando la policía desalojo la iglesia de San Francisco de Asís en Vitoria, lugar donde 4.000 trabajadores en huelga estaban reunidos en asamblea. La policía lanzó gases lacrimógenos al interior de la iglesia y disparó con fuego real y pelotas de goma a las personas que salían del recinto. Como consecuencia hubo seis fallecidos y 120 heridos. Nunca se investigo lo que paso allí. El Ministro del Interior era Fraga Iribarne, ministro franquista, el mismo que un par de años después fundo Alianza Popular, el partido origen del actual Partido Popular, del cual Fraga fue su Presidente durante muchos años.

Tampoco podemos olvidar y si contar, los asesinatos de los Abogados de Atocha en enero de 1977, hace 46 años, cuando un comando ultraderechista penetró en un despacho de abogados laboralistas de Comisiones Obreras (CCOO.) y militantes del Partido Comunista de España (PCE), situado en el número 55 de la calle de Atocha y abrió fuego contra los allí presentes, matando a cinco personas y dejando heridas a cuatro. Su único delito era defender a los obreros y vecinos madrileños en los juzgados. El guardaespaldas de un político de ultraderecha, Blas Piñar, fue uno de los asesinos.

Más ejemplos: acaba de publicarse un libro-documental titulado “Allí donde se queman libros”. (Editorial Tecnos, Grupo Anaya 2023). Una interesante investigación sobre la violencia política contra las librerías. El estudio abarca desde los años 1962 al 2018 y de nuevo la extrema derecha es protagonista. En esos más de 50 años investigados, el 87 por ciento de los atentados contra librerías, corresponden a la ultraderecha y parapoliciales. Gracias Gaizka Fernández y Juan Francisco López, por vuestro excelente trabajo.

Ahora, en la actualidad española, una parte importante de la representación política de este nuestro querido país, a través de candidaturas claramente de extrema derecha en sus planteamientos y en sus hechos,  intenta de nuevo que se retroceda en los avances, derechos y libertades democráticas conseguidas a lo largo de los años.

Los pactos entre PP y Vox a nivel autonómico y municipal sirven para poder prever qué pasará a partir del 23J en el caso de que la derecha y la ultraderecha  consigan reunir la mayoría suficiente en el Congreso de los Diputados como para poder conformar Gobierno, pues no hay dudas que Núñez Feijóo está legitimado a la ultraderecha y la usará a nivel nacional en el caso de que la necesite.

Primero fue Castilla-León, en donde la ultima lindeza del gobierno PP-VOX es decir por boca de uno de sus Consejeros que flexibilizaran  los controles de tuberculosis en el sector vacuno, saltándose las normas del Gobierno de España, e incluso de la Comisión Europea, con el consiguiente peligro para la salud.

Ya no es solo Abascal, en representación de VOX, también Feijóo ha dado luz verde al negacionismo machista, a la humillación de las víctimas del franquismo y al nacionalismo españolista, así como a la persecución y la criminalización de los inmigrantes. Además, atentan claramente  contra los servicios públicos con bajadas masivas de impuestos. Este es el modelo de Vox y PP que sirve como preludio de un hipotético escenario a nivel nacional. Ahí tenemos lo que ya está pasando en Castilla León y en breve en otras autonomías y ciudades donde va a entrar a gobernar el PP, acompañado por Vox.

Y por favor, no solo se trata de llamarlos fascistas, que algunos lo son. Hay que descubrir  que han hecho  y que quieren hacer,  con ejemplos concretos y por supuesto recordando la historia y no quedarnos en lo que pasó anteayer, o en los 140 caracteres de Tuiter.

Hay que profundizar y estudiar más las cosas antes de caer en el olvido de lo que ha pasado históricamente en España, en lo que se promete en las campañas electorales y después en lo que se hace, o han hecho, cuando gobernaban unos u otros. No podemos perder la perspectiva de la historia de nuestro país. La histórica y la cercana, pues desde 1978 que se realizaron las primeras elecciones democráticas, después del franquismo hemos tenido 45 años, con distintos gobiernos y debemos profundizar en sus comportamientos en temas claves para la vida de las personas.

Termino. En parte de  Europa y  de forma especial en Alemania se está trazando una línea roja contra estos energúmenos de la ultraderecha.. Aquí, en nuestra querida España, se les está consintiendo todo. Esta es la herencia educacional histórica que estamos transmitiendo a nuestros hijos y nietos en un próximo futuro. Intentemos reflexionar  y tracemos nosotros mismos, el pueblo llano, nuestra línea roja no votándolos el 23J.

Francisco Naranjo Llanos, director Fundación Abogados de Atocha y sindicalista de CCOO.