LEMA DE ESTE BLOG...

LEMA DE ESTA BLOG: ... hay un rayo de sol en la lucha que siempre deja la sombra vencida. (Miguel Hernández)

PAPA NOEL O LOS REYES MAGOS…

 

Papa Noel y los Reyes Magos (foto cogida de internet).

El origen de Papá Noel se remonta a San Nicolás de Bari, un obispo del siglo IV y su figura fue adoptada por los holandeses como Sinterklaas, un personaje que llegó a América, transformándose en el Santa Claus que conocemos. La tradición de Papá Noel en España compite con los arraigados Reyes Magos y se consolidó con el marketing. En España, se popularizo masivamente en los años 70 y 80 del siglo pasado, hace apenas 50 años, 

La clave para su expansión fue que en esa época caló en las familias la disyuntiva que si los regalos llegaban el 6 de enero (día de Reyes), los niños tenían poco tiempo para jugar con los juguetes antes de comenzar los colegios y ahí comenzaron a ganar los de Papa Noel, pues sus juguetes se podían entregar el 25 de diciembre, en plenas vacaciones navideñas.

Por su parte el origen de los Reyes Magos viene desde la Biblia, que habla de unos "magos” que siguieron una estrella hasta Belén para adorar al niño Jesús, ofreciéndole oro, incienso y mirra, aunque la tradición popular los estableció como tres hombres Melchor, Gaspar y Baltasar y les dio características específicas en la Edad Media, Los Reyes Magos se consolidaron en el siglo VI, y se les representó como hombres de distintas edades y continentes (Europa, Asia y África) para simbolizar la llegada de Jesús a casi todas las naciones.

La costumbre de recibir regalos en España el 6 de enero se popularizó en el siglo XIX, inspirada en otras fiestas infantiles europeas ya consolidadas, con las primeras Cabalgatas de Reyes en 1866, convirtiéndose en una tradición cultural y familiar muy arraigada en nuestro país.

Al margen de la historia, a mí, la verdad, siempre me han gustado más los Reyes Magos que Papa Noel, pues los veía más auténticos, mas nuestros. Eso del hombre gordo vestido de rojo siempre lo veía muy lejano. Tan lejano que cuando yo era niño, que es cuando más te gustan los reyes, no recuerdo ni siquiera que existiera Papa Noel. 

Bueno, teniendo en cuenta que yo procedo de un pequeño pueblo de Extremadura y en aquella época (años 50 del siglo pasado) no existía TV ni redes sociales, era lógico que no lo conociera. Lo máximo una radio, radio que no recuerdo que hablara de Papa Noel y sí de lo Reyes Magos y  de lo bien que vivíamos en España, según el régimen dictatorial que sufríamos por aquel entonces.

En aquel tiempo, nos gobernaba un señor gallego, un cruel fascista, llamado Francisco Franco, un dictador impuesto por “la ley de las armas”, persona que se sublevó contra la democrática república española, elegida por el pueblo con su voto en las urnas en febrero de 1936. Franco y sus huestes, gano la guerra civil en 1939, apoyado por los militares de alta graduación, por los señoritos capitalistas, por la cúpula del clero y por las fuerzas más reaccionarias y con su dictadura franquista, nos “gobernó”, hasta después de su muerte en 1975.

Volviendo a lo de los Reyes Magos, había cogido la pluma  -es un decir- pues uno ya escribe directamente en el ordenador, entre otras cosas porque tiene menos falta de ortografía que la pluma y además tiene sinónimos, cuestión que no tiene tampoco la pluma,   digo que había cogido la pluma, para contar los reyes que a mí me traían, un año sí y otro también, al menos hasta donde me alcanza la memoria, como comentaba antes, en los años 50 del pasado siglo.

Caja de lapides de marca Alpino 

El regalo que más recuerdo en aquellos años era una caja de lápices de colores, de marca Alpino, eso sí de docena, pero cortos, que para mi eran largos, lo de cortos me entere muchos años después, lapiceros que aunque parezca mentira me duraban hasta el año siguiente. Y eso que a veces venían acompañados con un pequeño afilalápices, cuestión que era interesante pero perjudicial, pues de tanto afilarlos se acaban antes. Y eso era todo por ese año.

Otros años recuerdo que además de los consabidos lápices me dejaban una pequeña cajita de mazapán redonda y dentro había un dulce en forma de culebra, que en principio daba un poco de miedo pero luego con lo rica que estaba perdía uno  cualquier precaución. Jo, los años que los reyes me dejaban dos cosas era el niño más feliz del mundo. Y el año que los reyes nos traían un estuche de madera, -plumier, le decíamos-, era lo más de lo más. Ahh, y estos regalos me los traían después de pasarte todo el día anterior preparando el agua para los reyes, el heno para los camellos, le dejaba incluso la chimenea encendida por si venían fríos, etc., etc 

Plumier para elementos de escribir

Y no me digáis que era poco y que lastima de niños, que en ese sentido mucho peor era lo que paso y me contaba mi suegra, que en sus tiempos de niña, los reyes le traían todos los años  “un duro de plata”, una moneda de cinco pesetas grande, con la que  mi suegra -niña- disfrutaba jugando el día de reyes todo el día. Pero el problema era que al día siguiente ya no tenía el duro de plata, pues los reyes habían vuelto y  se habían llevado el duro hasta el año siguiente. O sea le habían dejado un regalo temporal, como algunos contratos de trabajo.

En fin, que queréis que os diga: En aquellos años 50 sí que eran importantes y esperados los Reyes Magos y no ahora, que yo creo que se han vuelto incluso clasistas, pues para algunos niños le traen un montón de juguetes y a otros no les traen nada, incluso ni carbón, ...bueno tengo que reconocer que al igual que entonces para que vamos a discutir...Verdad,  verdadera. Es lo que hay. Vale. 

Para finalizar esta breve crónica os dejo con unos versos del gran poeta, Miguel Hernández, que describe la pena que da, siendo niño, el levantarte por la mañana ver que tu calzado esta vacío de regalos.

Por el cinco de enero,

cada enero ponía

mi calzado cabrero

a la ventana fría. 

Y encontraba los días

que derriban las puertas,

mis abarcas vacías,

mis abarcas desiertas. 

“Las desiertas abarcas” de Miguel Hernández.

 

Francisco Naranjo Llanos, director Fundación Abogados de Atocha (2013-2024) y sindicalista de CCOO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario